jueves, 23 de octubre de 2014

MIGUEL CANO



Hoy quisiera recomendar con énfasis, a los albacetenses que todavía no la hayan visto, que no se pierdan la magnífica exposición pictórica de Miguel Cano, que pueden visitar en el Museo Municipal hasta el 31 de este mes.
        Se trata de una antológica de 42 cuadros, algunos de ellos expuestos por primera vez, en los que, como viene siendo habitual en las muestras de Cano, la protagonista es la ciudad de Albacete: sus edificios más emblemáticos, y otros que no lo son tanto; las calles desiertas al amanecer o al anochecer, las esquinas, las fachadas, los tejados, algunos escaparates, detalles que rematan algunos edificios, rincones de la ciudad en los que no habíamos reparado, y que el pintor nos descubre como si acabaran de ser creados.
        Aunque no es, ni mucho menos, la primera vez que contemplamos la obra de Cano; aunque sepamos bastante aproximadamente qué es lo que no vamos a encontrar ante una nueva muestra suya, no deja de asombrarnos, una vez más, su maestría, que lo convierte, en la línea de Antonio López, en uno de los mayores exponentes vivos del realismo. Quien ve por primera vez sus cuadros, no distingue, hasta acercarse a un par de metros, si se trata efectivamente de óleos o de fotografías.
        Y es cierto que en cada exposición, incluso en los mismos cuadros, descubrimos cosas nuevas. En ésta, ya no me he detenido tanto en la exactitud de líneas y ángulos en precisa perspectiva, o en la prodigiosa fidelidad a los lugares retratados. Ha sido el tratamiento de la luz lo que más me llamado la atención, la luz dosificada en su justa medida, fluyendo por los tejados y las fachadas representados en los cuadros, creando en ellos lo que sólo los auténticos maestros son capaces de crear: el aire, el tiempo, la atmósfera que dota a lo representado de realidad.
        No sé si es correcto hablar de perfección en el arte. Como humanos, nunca la alcanzaremos, supongo. Y se quedará, en el mejor de los casos, en constante aspiración. Y tampoco tengo claro que sea la perfección lo que se persigue, o lo que Miguel Cano busca cuando pinta, pero si sé que su obra lleva ya mucho tiempo siendo un auténtico canto a la perfección.
       



                                                                                                      EL CATALEJO. RADIO CHINCHILLA,


                    JUEVES, 23 DE OCTUBRE 2014.

No hay comentarios:

Publicar un comentario